Eva tenía 4 años recién cumplidos cuando una serie de presuntas negligencias médicas nos la arrebataron. Decimos presuntas porque existe, pendiente de resolución judicial, una querella criminal por homicidio contra dos pediatras de La Coruña, que trabajan en el Hospital Modelo y tienen también sus propias consultas: el Dr. Julio González Yebra-Pimentel y la Dra. Mª del Carmen García Cabanas.

jueves, 8 de diciembre de 2011

[Prensa] Tensión en el juicio a dos pediatras imputados por la muerte de una niña

  • La niña de cuatro años murió tras una operación de vegetaciones en 2010
  • Los padres se querellaron contra los médicos por 'mala praxis'
  • Poseen informes que prueban la inexistencia de 'protocolos correctos'
  • Unas 50 personas tuvieron que ser desalojadas de los juzgados
  • Los médicos no contestan a la acusación al existir un 'juicio paralelo'
  • Se enfrentan a penas de hasta 4 años de prisión y 6 de inhabilitación

Marcos Nebreda - A Coruña - 29/09/2011
Publicada en El Mundo


El juez del Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña ha tomado declaración este miércoles a los dos pediatras del Hospital Modelo imputados por el fallecimiento de una niña de cuatro años en abril de 2010 a consecuencia de las complicaciones surgidas tras una operación para la extracción de amígdalas y vegetaciones.

Los padres de la menor se querellaron el pasado diciembre contra los facultativos por considerarlos responsables de un homicidio por imprudencia profesional. Raúl Varela, padre de la niña, que además ejerce la acusación particular en el caso, hablaba de "negligencias intolerables" en el edificio de los Nuevos Juzgados donde medio centenar de familiares, amigos y gente anónima se concentró para exigir "justicia" en el caso.

El otro letrado de la acusación, Cipriano Castreje, del Defensor del Paciente de Galicia, argumenta que la historia clínica de la niña Eva Varela demuestra que "hubo mala praxis por acción u omisión" y responsabiliza a los pediatras de no aplicar los protocolos correctos. Sus afirmaciones están avaladas con pruebas y testigos pero sobre todo con informes periciales elaborados por médicos privados.

'Nos decían que estaba controlada'

La menor falleció tan sólo 48 horas después de ingresar en el Modelo para una intervención que se desarrolló sin complicaciones. En el postoperatorio comenzaron las convulsiones, se le diagnosticó una bajada de sodio en sangre y se le cambió el tratamiento. Pero la situación empeoró y un edema cerebral acabó por causarle la muerte.

"Se equivocaron en la cantidad y tiempos de la medicación, se la administraron cada 24 horas y en estos casos debe ser cada tres o cuatro para evitar daño cerebral", sostiene Paula Puig, madre de Eva, aludiendo a los informes técnicos sobre los que basan su acusación.

Y recuerda que a uno de los pediatras "se le llamó de madrugada ante el empeoramiento pero ni vino al hospital ni cambió la medicación". Los médicos no la trasladaron al hospital Materno Infantil pese a la petición de los padres hasta el último momento, donde ya certificaron su muerte. "No nos hablaron de gravedad, nos decían que estaba controlada, fue un mazazo impresionante", recuerda Paula.

Castreje, letrado de la familia, no descarta tampoco que pueda haber más responsables que los dos médicos que atendieron a Eva. Ambos se enfrentan a penas de hasta 4 años de prisión y 6 de inhabilitación de probarse la negligencia. El hospital Modelo se ha personado como responsable civil subsidiario.

Negativa a contestar

De sus declaraciones se desprende que no manejan argumentos para negar esa "mala praxis", algo que ha dejado satisfechos a los letrados de la acusación particular a pesar de que ambos pediatras se negaron a contestar a sus preguntas y sólo atendieron a las demandas de su abogado y del magistrado. "El hecho de que no quieran responder indica que ocultan algo o temen autoinculparse y el juez así lo estima también", asegura la madre de la pequeña Eva. Sus padres apuestan por abrir un juicio oral y "llegar hasta el final" en este caso que aún está en fase de instrucción, aunque no niegan la dificultad debido al "fuerte corporativismo" en la profesión.

Mientras, el abogado de los pediatras, José Luís Gutiérrez, defiende la actuación "correcta" de sus clientes ante un "cuadro grave que intentaron subsanar". Alega que ambos poseen dilatada experiencia y niega conocer los informes periciales encargados por los progenitores que demuestran la "mala praxis" en el caso.

'Juicio paralelo'

Además, explica que él mismo les pidió que no respondieran a preguntas de los letrados de la acusación al enterarse de que "había una convocatoria para lincharlos públicamente" y se estaba llevando a cabo "un juicio paralelo" en las redes sociales.

Los asistentes corearon gritos de "asesino y cobardes" dirigidos a los médicos y se vivieron momentos tensos "hasta el punto que el juez ordenó el desalojo", dice Gutiérrez. La madre de la víctima había pedido apoyo a través de Facebook y justifica que los concentrados en los juzgados "lo hicimos de forma pacífica y desalojamos el edificio del mismo modo cuando se nos pidió".

Mientras, tanto Raúl como Paula sobrellevan el día a día como pueden. "Es muy duro recordarlo todo y lamentamos que el hospital no haya tomado medidas para evitar casos similares", cuentan. La hermana de la pequeña Eva, de ocho años, "habla todos los días de ella", asegura Paula, que ha encontrado consuelo en su hijo de siete meses, pero que promete no cejar en el empeño de aclarar las circunstancias que rodearon a la muerte de su hija.

2 comentarios:

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