Eva tenía 4 años recién cumplidos cuando una serie de presuntas negligencias médicas nos la arrebataron. Decimos presuntas porque existe, pendiente de resolución judicial, una querella criminal por homicidio contra dos pediatras de La Coruña, que trabajan en el Hospital Modelo y tienen también sus propias consultas: el Dr. Julio González Yebra-Pimentel y la Dra. Mª del Carmen García Cabanas.

viernes, 24 de diciembre de 2010

[Prensa] Uns pais denuncian a dous pediatras do Hospital Modelo de A Coruña pola morte da súa filla de 4 anos

Europa Press - 23/12/2010
Publicada en Atlántico Diario
   
O Xulgado de Instrución número 2 de A Coruña admitiu a trámite a querela presentada por uns pais contra dous pediatras do Hospital Modelo de A Coruña por presunto homicidio imprudente, tras a morte da súa filla de 4 anos despois de ser sometida a unha operación, en marzo deste ano, para unha extracción de amígdalas e vexetacións, segundo informou El Defensor del Paciente nun comunicado.

Segundo esta asociación, a operación levouse a cabo, por parte dun otorrinolaringolo, sen complicacións e "con total normalidade". Non obstante, tras ser trasladada ao cuarto, a nena empezou a sentir molestias a medida que avanzaba a tarde, chegando a vomitar.

O Defensor do Paciente sostén que o médico considerou os "síntomas normais tras unha intervención deste tipo", aínda que precisa que estes se agravaron con "pequenos espamos" que se foron intensificando "en intervalos de tempo cada vez menores".

A menor sufriu posteriormente "unha grave convulsión" tras a cal, o pediatra de garda, "detéctalle unha rechamante baixada do nivel de sodio (hiponatremia)" en sangue", engade El Defensor del Paciente, que sostén que na madrugada do día 30 a menor sofre unha nova convulsión.

Con posterioridade, a nova pediatra de urxencias cámbialle o tratamento e realízaselle un TAC, que constata "un severo edema que finalmente lle ocasiona a morte cerebral", explica esta asociación, que asegura que así determínano tamén "as probas máis exhaustivas que se lle practicaron no Hospital Materno Infantil" a onde foi trasladada.

PRESUNTA NEGLIXENCIA

En declaracións a Europa Press, o pai da menor, Raúl Varela, que, na súa condición de avogado leva tamén o caso xunto a outros dous letrados, entre eles o avogado da Asociación El Defensor del Paciente en Galicia, Cipriano Castreje, indicou que o que reclaman é que se faga Xustiza" ante o que cualificou como unha actuación "neglixente" por parte dos dous pediatras que se encargaron do postoperatorio.

Na súa opinión, déuselle á nena un tratamento incorrecto ante o estado que presentaba "porque a medicación que se pautó era escasa". Ademais, sinalou que o primeiro pediatra "non viu a nena" porque tiña "unha garda ambulatoria e estaba na súa casa cando di que se lle manteña o tratamento".

No caso da segunda pediatra que a atendeu, os pais da menor entenden que "reaccionou tarde" cando lle cambiou as doses pautadas. Ademais, sosteñen que lles ocultou que a nena sufrira "unha parada cardiorrespiratoria".

DECISIÓNS "TARDÍAS"

Nos mesmos termos, pronunciouse o letrado de El Defensor del Paciente en Galicia, Cipriano Castreje, para quen houbo unha "mala praxe" por parte de ambos os dous pediatras. "Todas as decisións foron, ao noso xuízo, tardías", sinalou a Europa Press este letrado.

   Ademais, precisou que piden que ambos os dous especialistas declaren en calidade de imputados e que o Hospital Modelo "aclare a relación profesional que ten con eles", apuntou. A pena por un posible homicidio imprudente leva consigo penas de prisión e inhabilitación para o exercicio da profesión de ata seis anos.

[Prensa] Se querellan contra dos pediatras de A Coruña por la muerte de una niña

La pequeña de 4 años falleció tras una cirugía de extracción de las amígdalas

24/12/2010
Publicada en El Correo Gallego


El Juzgado de Instrucción Número 2 de A Coruña ha admitido a trámite la querella contra  dos pediatras del Hospital Modelo de la capital herculina por la muerte de una niña de 4 años, tras una operación de extracción de amígdalas, que inicialmente se desarrolló sin mayores complicaciones.

El abogado de la familia, Cipriano Castreje Martínez, de los Servicios Jurídicos de la Asociación del Defensor del Paciente, calificó los hechos acontecidos con la pequeña Eva.V.P. como posible homicidio imprudente, que lleva aparejadas penas de prisión e inhabilitación para ejercer la profesión durante 6 años.

Según informan desde la Asociación del Defensor del Paciente, Eva ingresó el pasado 29 marzo en el Modelo de A Coruña donde fue sometida, por la mañana, a una sencilla cirugía de extracción de amígdalas y vegetaciones, la que se llevó a cabo con toda normalidad.

Sin embargo, según apuntan desde el Defensor del Paciente, a medida que van pasando las horas, a lo largo de la tarde, “observamos que en lugar de ir mejorando, la niña empieza a sentirse cada vez más molesta, somnolienta y apenas habla. Vomita en ocasiones, no habla con los padres, no contesta a  preguntas, se le ven las pupilas muy dilatadas y cada vez más adormilada, abriendo los ojos únicamente para quejarse, pero sin hablar”. El médico acude a media tarde, y considera los síntomas como normales tras una intervención de este tipo, por lo que comunica a los padres que no hay motivos para preocuparse.

Tras la visita del doctor, la situación de Eva se agrava y comienza a convulsionar. Avisados los médicos de urgencias la estabilizan y llaman al pediatra de  guardia , el doctor J.G.Y, que constata una hiponatremia en la pequeña, ingresada ya en la UCI. Sigue convulsionando y los padres avisan al doctor P., que no acude a verla y se remite al tratamiento antes prescrito.

A las 10 de la mañana del día 30, inicia su turno la Pediatra C.G.C., quien se hace cargo de la niña, sin conseguir revertir la hiponatremia severa que padece desde hace más de doce horas. Será más adelante cuando proceda a un cambio en el tratamiento, aumentando el aporte de sodio a la niña. Resultó ser demasiado tarde, pues cuando se le realiza, en la tarde del día 30, un TAC para observar si hay daños en su cerebro, como consecuencia de la hiponatremia, el informe anuncia un severo edema, que finalmente ocasionará la muerte cerebral de la niña.

[Prensa] Hospital Modelo de A Coruña denunciado por "homicidio imprudente"




24/12/2010
Publicada en Faro de Vigo

El Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña ha admitido a trámite la querella contra dos pediatras del Hospital Modelo “por presunto homicidio imprudente”, que fue presentada por los padres de una niña de cuatro años que falleció tras ser sometida a una operación. Los padres consideran que hubo negligencia médica a la hora de suministrar el tratamiento en el posoperatorio y se presentan avalados por el Defensor del Paciente.

La pequeña fue operada de extracción de amígdalas y vegetaciones, según informó ayer el Defensor del Paciente. Fuentes del centro hospitalario declinaron hacer declaraciones sobre el caso a este periódico.

Sin embargo, la Asociación de defensa de los pacientes aseguró que la operación se realizó por parte de un otorrinolaringólogo sin complicaciones y “con total normalidad” en marzo. Pese a todo, tras ser trasladada a la habitación, la niña empezó a sentir molestias a medida que avanzaba la tarde, llegando a vomitar. Los informes del Defensor del Paciente sostienen que el médico consideró los “síntomas normales tras una intervención de este tipo”, aunque precisa que éstos se agravaron con “pequeños espasmos” que se fueron intensificando “en intervalos de tiempo cada vez menores”. 

Luego de ser atendida por varios médicos, la nueva pediatra de Urgencias le cambió el tratamiento y ordenó realizarle un TAC, que constató “un severo edema que finalmente le ocasiona la muerte cerebral”, explica esta asociación. Así lo determinan también “las pruebas más exhaustivas que se le practicaron en el Materno, a dónde fue trasladada”.

El padre de la menor, Raúl Varela que, en su condición de abogado lleva también el caso junto a otros dos letrados, indicó que reclaman “que se haga Justicia” ante una actuación “negligente” por parte de los dos pediatras que se encargaron del postoperatorio. En su opinión, se le dio a la niña un tratamiento incorrecto ante el estado que presentaba “porque la medicación que se pautó era escasa”. 

Además, señaló que el primer pediatra “no vio a la niña” porque tenía “una guardia ambulatoria y estaba en su casa cuando dijo que se le mantenga el tratamiento”. Se trata de una acusación que se incluye en la querella contra ambos profesionales médicos.

En el caso de la segunda pediatra que la atendió, los padres de la menor entienden que “reaccionó tarde” cuando le cambió las dosis pautadas. Además, sostienen que les ocultó que la niña había sufrido “una parada cardiorrespiratoria” y así lo comunicarán al juez.

Mala praxis
En los mismos términos se pronunció ayer el letrado de El Defensor del Paciente en Galicia, Cipriano Castreje, para quien hubo una “mala praxis” en este trágico episodio sanitario por parte de ambos pediatras del hospital Modelo de A Coruña. “Todas las decisiones fueron, a nuestro juicio, tardías”, señaló el representante de los pacientes.

[Prensa] La familia de una niña que murió tras operarse denuncia al Modelo

Los padres acusan a dos pediatras de "homicidio imprudente" y alegan que no se le dio el tratamiento adecuado durante el postoperatorio


24/12/2010
Publicada en La Opinión de A Coruña


El Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña ha admitido a trámite la querella presentada por unos padres contra dos pediatras del Hospital Modelo por presunto homicidio imprudente tras la muerte de su hija de 4 años después de ser sometida a una operación, en marzo de este año, para una extracción de amígdalas y vegetaciones, según informó ayer El Defensor del Paciente. Fuentes del centro hospitalario declinaron hacer cualquier tipo de declaración sobre el caso a este periódico. 

La asociación de defensa de los pacientes, sin embargo, aseguró ayer que la operación se llevó a cabo por parte de un otorrinolaringólogo sin complicaciones y "con total normalidad". Pese a todo, tras ser trasladada a la habitación, la niña empezó a sentir molestias a medida que avanzaba la tarde, llegando a vomitar. El Defensor del Paciente sostiene que el médico consideró los "síntomas normales tras una intervención de este tipo", aunque precisa que éstos se agravaron con "pequeños espasmos" que se fueron intensificando "en intervalos de tiempo cada vez menores". 

La menor sufrió posteriormente "una grave convulsión" tras la cual, el pediatra de guardia, "le detecta una llamativa bajada del nivel de sodio (hiponatremia) en sangre", añade El Defensor del Paciente, que sostiene que de madrugada la niña sufre una nueva convulsión. Con posterioridad, la nueva pediatra de Urgencias le cambia el tratamiento y se le realiza un TAC, que constata "un severo edema que finalmente le ocasiona la muerte cerebral", explica esta asociación, que asegura que así lo determinan también "las pruebas más exhaustivas que se le practicaron en el Materno, a donde fue trasladada". 

El padre de la menor, Raúl Varela, que, en su condición de abogado lleva también el caso junto a otros dos letrados, indicó que lo que reclaman es "que se haga Justicia" ante lo que calificó como una actuación "negligente" por parte de los dos pediatras que se encargaron del postoperatorio. En su opinión, se le dio a la niña un tratamiento incorrecto ante el estado que presentaba "porque la medicación que se pautó era escasa". Además, señaló que el primer pediatra "no vio a la niña" porque tenía "una guardia ambulatoria y estaba en su casa cuando dice que se le mantenga el tratamiento". 

En el caso de la segunda pediatra que la atendió, los padres de la menor entienden que "reaccionó tarde" cuando le cambió las dosis pautadas. Además, sostienen que les ocultó que la niña había sufrido "una parada cardiorrespiratoria". 

En los mismos términos se pronunció ayer el letrado de El Defensor del Paciente en Galicia, Cipriano Castreje, para quien hubo una "mala praxis" por parte de ambos pediatras. "Todas las decisiones fueron, a nuestro juicio, tardías", señaló. Además, Castreje precisó que piden que ambos especialistas declaren en calidad de imputados. El delito de homicidio imprudente conlleva penas de prisión e inhabilitación de hasta seis años. 

Querella admitida a trámite

Admitida a trámite Querella contra dos pediatras del Hospital Modelo (A Coruña) por presunto homicidio imprudente de una niña de 4 años.

El pasado 29 de Marzo de 2010, la niña de 4 años, Eva V. P., ingresa en el Hospital Modelo de A Coruña para ser intervenida de una sencilla operación de extracción de amígdalas y vegetaciones, la cual se lleva a cabo sin complicaciones de ningún tipo y con total normalidad.

Tras ser intervenida, cuando a última hora de la mañana suben a la habitación a la niña, ésta viene consciente e incluso habla con los padres.

Sin embargo, a medida que van pasando las horas, a lo largo de la tarde, observamos que en lugar de ir mejorando, la niña empieza a sentirse cada vez más molesta, somnolienta y apenas habla. Vomita en ocasiones, no habla con los padres, no contesta a preguntas, se le ven las pupilas muy dilatadas y cada vez más adormilada, abriendo los ojos únicamente para quejarse, pero sin hablar. El médico acude a media tarde, y considera los síntomas como normales tras una intervención de este tipo, por lo que nos comunican que no hay motivos para preocuparse.

Tras la visita del doctor, la situación en la que Eva se encuentra se agrava preocupantemente al iniciar pequeños espasmos, los cuales cada vez se intensifican más y en intervalos de tiempo cada vez menores. Nuevamente los padres piden a la enfermera que acuda a la habitación y, tras observarla, les dice que no deben preocuparnos, que la niña está cansada y en cuanto duerma un poco empezará a sentirse mejor. Desgraciadamente esto no fue así, pues a los pocos minutos la niña sufrió una grave convulsión con rigidez absoluta en su cuerpo y ojos en blanco. A gritos, los padres piden ayuda y acude la enfermera que da aviso a los médicos de urgencias quienes rápidamente se presentan en la habitación para estabilizar a la niña. Ante la gravedad de la niña, se llama al pediatra que está de guardia esa noche, el Dr. J. G. Y. que detecta una importante y llamativa bajada del nivel de sodio (hiponatremia) en sangre, lo que evidencia una grave hiponatremia.

A las cinco de la mañana del día 30, la niña vuelve a sufrir una nueva convulsión, que si bien los padres no se la comunican, a pesar de estar visitando a la niña en la UCI cada poco tiempo, sí avisan telefónicamente al Dr. P., quien, inexplicablemente, no acude a ver a la niña y se remite al tratamiento pautado a las diez de la noche.

Esto es totalmente inaceptable, pues si la pequeña lleva con un tratamiento administrado durante siete horas y se repite la convulsión, resulta evidente que el tratamiento no está surtiendo el efecto buscado y que deberían, bien hacerle más pruebas, bien modificar o aumentar algunos de los medicamentos pautados, o bien ordenar su traslado a otro hospital más especializado. Cualquier cosa, menos mantener sin alteraciones la actuación médica ordenada y que nada está haciendo para recuperar a la niña.

A las diez de la mañana del día 30, inicia su turno la Pediatra C. G. C., quien se hace cargo de la niña, sin conseguir revertir la hiponatremia severa que la niña padece desde hace más de doce horas. Será más adelante cuando la Dra. C. procede a realizar un importante y drástico cambio en el tratamiento, modificando el suero que se le está aportando y aumentando de forma considerable y evidente el aporte de sodio a la niña. En cualquier caso, resultó ser demasiado tarde, pues cuando se le realiza, en la tarde del día 30, un TAC para observar si hay daños en su cerebro, los cuales pueden producirse como consecuencia de la hiponatremia, el informe anuncia un severo edema, que finalmente ocasionará la muerte cerebral de nuestra niña. A la vista del TAC, la Dra.C. ordena el traslado de Eva al Hospital Materno Infantil, donde le realizan pruebas más exhaustivas que evidencian, definitivamente, la muerte cerebral de la niña.

El doctor encargado del tratamiento de la niña recibe una llamada telefónica de madrugada informándole una enfermera de que la niña ha vuelto a convulsionar (síntoma de extrema gravedad) y ni va a verla ni modifica el tratamiento. El abogado de la familia, Cipriano Castreje Martínez de los Servicios Jurídicos de la Asociación del Defensor del Paciente califica estos hechos como posible homicidio imprudente, que llevan aparejadas penas de prisión e inhabilitación para el ejercicio de la profesión de hasta 6 años.

Ahora el Juzgado de Instrucción número 2 de A Coruña, ha admitido a trámite la querella contra los dos pediatras.

Los padres de la menor están en disposición de atender a los medios de comunicación.

La defensa del caso está siendo tramitada por el Letrado D. Cipriano Castreje Martínez, especialista en derecho sanitario y adscrito a los Servicios Jurídicos de El Defensor del Paciente.

DEFENSOR del PACIENTE